DERECHOS HUMANOS Y DIFICULTADES PARA  DORMIR

A lo largo de esta semana hemos estado hablando sobre estos temas. Para empezar, hablaremos de un tema de gran importancia como lo son nuestros derechos. 

DERECHOS HUMANOS

¿Qué son?

Los derechos humanos se basan en el principio de respeto por el individuo. Su suposición fundamental es que cada persona es un ser moral y racional que merece que lo traten con dignidad, sin distinción alguna de raza, color, sexo, religión, opinión política o cualquier otra condición.  Se llaman derechos humanos porque son universales. 

La libertad guiando al pueblo, Eugène Delacroix  (1830)








En este enlace se pueden encontrar algunos artículos de los derechos humanos:  http://www.un.org/es/documents/udhr/

Cerrando este tema, prosigamos hablando sobre los problemas para dormir de los que hablamos en clase, al que denominamos ``Troubled sleep´´.

                                   http://emph.oxfordjournals.org/content/2014/1/32.short

En este enlace podréis encontrar un fragmento del artículo, que incluye las palabras clave. 

Resumiendo, el artículo nos informa sobre los problemas que podemos tener al dormir con un bebé y las causas de este. Resulta que los bebés no lloran por tener hambre, querer estar con su madre, etc... Sino porque ellos no quieren que el padre duerma con su madre. 

Y... ¿por qué?

Bueno, según este artículo, la razón es porque ellos saben que si sus padres duermen juntos, podrían tener otro bebé y eso, supondría un ''problemón'' para este... ¡Tendría un bebé enemigo! ya que toda la atención recaería en el recién nacido y eso no es lo que él quiere.

 El llanto nocturno del bebé porque necesita comer es, en realidad, una respuesta innata que busca evitar la llegada de alguien más con quien compartir ese alimento que está en la madre, de esta manera asegura su supervivencia.

Evitar que la madre pueda tener otro hijo al estar cansada, ese es su objetivo. 

Además, parece ser que el hecho de no descansar bien es una de las causas principales de infertilidad en las mujeres, al igual que amamantar de forma tan frecuente. 

Así que lo único que pueden hacer para que esto no ocurra es... ¡Llorar e impedir que los padres duerman! 

Pero aún así, siguen siendo adorables ¿verdad? 

María Carmona González. 4ºESO C